Hoy es el Día Internacional de la Familia y para celebrarlo queremos recomendaros diferentes actividades para realizar con los más pequeños en casa.
El juego es la manera que tienen los niños para aprender y descubrir el mundo que les rodea. Necesitan experimentar y es importante que lo hagan con materiales desestructurados. Estos materiales permiten que el niño desarrolle su imaginación dándole muchas más opciones que el juego que solemos comprar habitualmente. Debemos tener en cuenta que cuantas menos cosas haga el juguete más harán nuestros hijos. Si el juguete no está definido podrán darle todos los usos que deseen y además podrán incluso crearlos y darles forma con nosotros. Podemos aprovechar todo tipo de materiales y así inculcar el aprovechamiento, el reciclaje y el valor de las cosas más sencillas.
Para construirlos sólo tenemos que ser un poquito creativos adaptándonos a nuestros hijos. Os ponemos algunas ideas:
También es interesante tratar las emociones con juegos de imitar caras, encontrar parejas, relacionar... Ayudando a los más pequeños a entender lo que sienten, a saber mostrarlo, a empatizar... Además podemos trabajar las partes de la cara.
Podemos dibujar en pintura o buscar objetos y formas en sémola...
Otras opciones pueden ser hacer estampación con tapones de corcho o rollos de papel. Las posibilidades son infinitas. Os animamos a comentar vuestras ideas.
El juego es la manera que tienen los niños para aprender y descubrir el mundo que les rodea. Necesitan experimentar y es importante que lo hagan con materiales desestructurados. Estos materiales permiten que el niño desarrolle su imaginación dándole muchas más opciones que el juego que solemos comprar habitualmente. Debemos tener en cuenta que cuantas menos cosas haga el juguete más harán nuestros hijos. Si el juguete no está definido podrán darle todos los usos que deseen y además podrán incluso crearlos y darles forma con nosotros. Podemos aprovechar todo tipo de materiales y así inculcar el aprovechamiento, el reciclaje y el valor de las cosas más sencillas.
Para construirlos sólo tenemos que ser un poquito creativos adaptándonos a nuestros hijos. Os ponemos algunas ideas:
Podemos trabajar las formas geométricas con objetos que tengamos por casa e incluso comparar tamaños posteriormente con objetos que tengan la misma forma.
Podemos trabajar las series lógicas, los colores y la verticalidad mediante patrones que hagamos con los niños. (Se puede variar la dificultad inclinando las barras en diferentes direcciones en el patrón, cruzando barras...)
También es interesante tratar las emociones con juegos de imitar caras, encontrar parejas, relacionar... Ayudando a los más pequeños a entender lo que sienten, a saber mostrarlo, a empatizar... Además podemos trabajar las partes de la cara.
El desarrollo de la psicomotricidad fina y gruesa también es importantísimo en estas edades (de 0 a 6 años). Podemos hacer formas con hilo y trabajar la psicomotricidad fina (formas geométricas, números, letras... Todo aquello que se nos ocurra y se les ocurra a los pequeños) siempre atendiendo al interés y a los conocimientos previos de los niños con los que queramos utilizarlo.
Para desarrollar la psicomotricidad gruesa, por otro lado, podemos usarlo en el suelo y utilizar música entrando en el círculo al parar la música, por ejemplo.
Podemos reciclar tapones pegándoles gomets de colores y buscando parejas o siguiendo series de colores en una huevera.
Con pinzas podemos trabajar los números como en los ejemplos de las imágenes.
Podemos dibujar en pintura o buscar objetos y formas en sémola...
Otras opciones pueden ser hacer estampación con tapones de corcho o rollos de papel. Las posibilidades son infinitas. Os animamos a comentar vuestras ideas.